Casi todo me importa una mierda.


 He tenido la suerte de que coachers y psicólog@s me han enseñado a interpretar la vida de otra manera. Para mi, la pareja, la familia y amig@s son importantes, enseñar es importante, pensar campañas es importante, Publicitarios Implicados es importante, escribir es importante, la música es importante, el deporte es importante, el cine y las series son importantes.

Todo lo demás es relativo. Ganar premios está muy bien, pero no es importante. Pequeños roces o discusiones en el trabajo, no son importantes. El whats no es importante. Instagram no es importante. Ser famoso, no es importante, ser reconocido tal vez sí.

Tener un Ferrari, un reloj de medio millón de euros, una casa enorme que casi siempre no aprovechas, un yate que sólo usas en verano o una colección de botas Berlutti, no es importante.

Mi colección de vinlos y cds, si.

Viajar está muy bien, pero no necesito pagar una habitación de 3.000 euros la noche.

Por mi vida han pasado amig@s que han roto conmigo por motivos absurdos, sin valorar los vínculos emocionales y experienciales que hemos vivido y compartido.

Parece que nos importan más las anécdotas de l@s famos@s e influencers que la guerra de Gaza. Ha quedado demostrado en linkedin: Mi post sobre el corazón supera las 5.000 visualizaciones, mi post sobre no matar civiles se quedó en 500.

La superficialidad se percibe en cada momento, así como las apariencias, demostrar que mandas, los celos ante las iniciativas innovadoras.

Resulta muy fácil crisparse y muy difícil elogiar.

Nos resulta más fácil reprochar o criticar que felicitar.

Y las palabras bonitas parece que estén prohibidas.

Lo importante para ti es el sol. Las nubes siempre estarán, personas tóxicas, spoilers, negativas. No importa. Los rayos de luz siempre se impondrán si para ti es lo que cuenta.

Porque lo que realmente necesitas es sentirte feliz. Tomar consciencia de que eres un privilegiado. Reconocer la suerte de no haber nacido en Gaza, en Siria o Sudán.

Disfutar de un vermut, un paseo junto al mar, una canción, una peli, estar con quien quieres estar, esto es importante.

Buscar defectos, estar más pendiente de lo que no funciona, alimentar tu ego, imponer tus ideas, no es importante.

No pierdas el tiempo con tonterías.

Disfruta hoy, aquí y ahora.

Y si no estás bien, pide ayuda.





Un buen viajante no tiene ni planes fijos ni la intención de llegar.



Comentarios